Puede decirse que es la película más “larga” de Hawks (exceptuando Tierra de faraones, su épica de sandalias) pero las aventuras de ese grupo de aventureros que se dedica a cazar animales en África para vender a los zoológicos podría durar todo el día que el espectador nunca dejaría de mirar la pantalla. Pasan muchísimas cosas, pero al mismo tiempo sólo sucede la relación entre personajes entrañables y el puro deporte peligroso, además de una comedia romántica en segundo plano entre John Wayne y Elsa Martinelli. Las secuencias de cacería son bellísimas (nadie olvidará la del rinoceronte, modelo de aquella que Steven Spielberg desplegara en El Mundo Perdido: Jurassic Park y, antes, en Tiburón) y la música de Henri Mancini es como la banda que toca en una glorieta amenizando un picnic antiguo. Pocas películas están hechas con placer puro y elefantes bebé.
Entrada sin cargo para argentinos y residentes. Reservas en Entradas BA. Sujeto a capacidad de sala.
A lo largo de todo el año impulsamos convocatorias abiertas y públicas para invitar a referentes culturales, colectivos, organizaciones, instituciones y artistas a proponer y llevar adelante contenidos culturales y artísticos junto al centro.
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